Una de las cosas que más me choca cuando hay un conflicto armado es que se denuncie el uso de ciertos tipos de armas.
En la reciente invasión de Gaza por parte de Israel, parece ser que los israelíes usaron bombas de racimo y bombas de fósforo blanco. Por lo visto, estos dos tipos de bombas están prohibidas por la legislación humanitaria internacional.
La sensación que me da es que la prohibición de estos tipos de armas justificara el uso de todas las demás. Parece que las demás no causaran muerte, dolor y destrucción, que no llenaran hospitales, que no mutilaran, que no mataran a niños…
Ojalá algún día todas las armas estén prohibidas y sean como esos virus vencidos reducidos sólamente ya a un frasco de laboratorio. Desgraciadamente creo que tardaremos mucho en encontrar una vacuna.
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